Revisión del sistema de calefacción del coche: Comodidad y seguridad
Cuando llega el frío, la calefacción del coche deja de ser un simple elemento de confort para convertirse en un componente clave de seguridad. Un sistema de calefacción en mal estado no solo hace incómodo el viaje: también puede afectar a la visibilidad del conductor, dificultar el desempañado de los cristales e incluso indicar fallos en el circuito de refrigeración del motor.
En este artículo explicamos por qué es importante revisar el sistema de calefacción antes del invierno, qué elementos deben verificarse y qué señales indican que algo no está funcionando como debería.
¿Cómo funciona el sistema de calefacción del coche?
A diferencia de los aparatos de aire acondicionado domésticos, la calefacción del coche no genera calor, sino que lo aprovecha del motor. El proceso es el siguiente:
- El motor alcanza su temperatura de funcionamiento.
- El líquido refrigerante absorbe el calor del motor.
- Ese líquido caliente pasa por un radiador pequeño (radiador de calefacción) situado dentro del habitáculo.
- Un ventilador impulsa aire a través del radiador y lo dirige al interior del coche.
Por eso, cuando el sistema de calefacción no calienta, muchas veces el problema está relacionado con el circuito de refrigeración del motor.
Beneficios de un sistema de calefacción en buen estado
✅ Confort para los ocupantes
Conducir con frío reduce la concentración y aumenta la fatiga. Una temperatura adecuada mejora la experiencia y el bienestar.
✅ Visibilidad y seguridad
El desempañado rápido de los cristales es esencial para evitar situaciones de riesgo. La calefacción actúa junto al aire acondicionado para eliminar la humedad interior.
✅ Prevención de averías
Un fallo en la calefacción puede indicar:
- Nivel bajo de refrigerante
- Fugas en el circuito
- Problemas en el termostato o la bomba de agua
Ignorarlo puede acabar en un sobrecalentamiento del motor.
Señales de que tu calefacción necesita revisión
Si observas alguno de estos síntomas, pide una revisión cuanto antes:
- ❄️ No calienta el habitáculo o tarda demasiado en hacerlo
- 💧 Aparece humedad persistente o olor dulce (posible fuga del radiador de calefacción)
- 🚗 La temperatura del motor sube más de lo normal o fluctúa
- 🌫️ Los cristales tardan mucho en desempañarse
¿Qué revisamos en el taller?
En una revisión profesional del sistema de calefacción se comprueban:
| Elemento a revisar | ¿Qué se verifica? |
|---|---|
| Nivel y estado del refrigerante | Cantidad correcta y calidad (si está degradado pierde propiedades) |
| Bomba de agua | Si impulsa el refrigerante correctamente |
| Termostato | Asegura que el motor alcanza su temperatura óptima |
| Radiador de calefacción | Sin obstrucciones ni pérdidas |
| Ventilador interior y selector de aire | Caudal adecuado y funcionamiento de las trampillas de mezcla |
En muchos casos, una simple sustitución del refrigerante y purgado de aire soluciona la falta de calefacción.
Consejos de mantenimiento para prolongar la vida del sistema
- Cambia el líquido refrigerante cada 2 años o 40.000 km.
- No conduzcas con el depósito de refrigerante por debajo del mínimo.
- Si percibes olor raro o el parabrisas se empaña continuamente, revisa el radiador interior.
- Evita usar solo agua como refrigerante: puede provocar óxido y daños internos.
Revisar el sistema de calefacción no es solo una cuestión de comodidad: también garantiza tu seguridad y la del resto de ocupantes. Un coche que calienta bien, desempaña rápido y mantiene la temperatura del motor estable es sinónimo de confianza en la carretera.
Si notas que el interior tarda en calentarse o los cristales no desempañan bien, pide una revisión antes de que llegue el frío intenso.
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