Sistema de frenos y temperaturas altas: Todo lo que debes saber
El sistema de frenos es uno de los elementos más importantes para la seguridad de un vehículo. Sin embargo, pocos conductores saben que las altas temperaturas del verano pueden afectar su rendimiento de forma significativa. Desde el desgaste acelerado hasta la pérdida de eficacia por sobrecalentamiento, conducir en calor extremo puede poner a prueba hasta los frenos más nuevos.
En este artículo te explicamos cómo afecta el calor al sistema de frenos, qué síntomas indican que algo no va bien, y qué debes hacer para mantenerlos en perfectas condiciones durante los meses más calurosos del año. Una revisión a tiempo puede ser la diferencia entre una frenada segura y un susto en carretera.
¿Por qué el calor afecta al sistema de frenos?
Los frenos funcionan por fricción: cuando pisas el pedal, las pastillas de freno presionan los discos o tambores, generando una gran cantidad de calor. Esta fricción puede calentar los frenos a temperaturas de 150 °C a más de 600 °C, dependiendo de la conducción. Si además estás en verano y conduces con temperaturas exteriores altas, el calor acumulado puede ser excesivo, provocando un fenómeno conocido como “fading”.
¿Qué es el fading?
El “fading” o fatiga del freno es la pérdida temporal de eficacia de frenado por exceso de temperatura. Puede deberse a:
-
Sobrecalentamiento de las pastillas o los discos.
-
Evaporación parcial del líquido de frenos.
-
Formación de una película de gases entre pastilla y disco.
Esto hace que el pedal se sienta más esponjoso, que haya que pisarlo más a fondo o que directamente el coche no frene como debería.
Componentes del sistema de frenos que más sufren con el calor
1. Pastillas de freno
El calor excesivo puede cristalizar su superficie, reduciendo la fricción. También puede provocar un desgaste más rápido y ruidos al frenar.
2. Discos de freno
Si alcanzan temperaturas muy altas y se enfrían rápidamente (por ejemplo, al pasar por un charco), pueden deformarse o agrietarse. Esto provoca vibraciones y pérdida de eficacia.
3. Líquido de frenos
Es higroscópico, es decir, absorbe humedad del ambiente. Si contiene agua, su punto de ebullición baja, y con el calor puede hervir, generando burbujas de vapor que hacen que el freno no actúe correctamente.
Signos de que los frenos no están funcionando bien
✔ El pedal se hunde más de lo habitual.
✔ El coche necesita más distancia para frenar.
✔ Se escucha un chirrido agudo o un roce metálico.
✔ El volante vibra al frenar.
✔ El testigo de frenos se enciende en el tablero.
¿Qué revisar antes del verano?
-
Estado de las pastillas (grosor mínimo: 3 mm).
-
Superficie de los discos (sin rayas profundas, grietas o deformaciones).
-
Nivel y color del líquido de frenos (cambiar cada 2 años).
-
Sensación del pedal (no debe sentirse esponjoso ni hundirse).
-
Fugas visibles en los latiguillos y mangueras.
Consejos para proteger los frenos en verano
✅ Conduce de forma progresiva: evita frenazos bruscos.
✅ Reduce velocidad con el motor en bajadas largas (freno motor).
✅ Evita cargas innecesarias en el coche que aumentan el peso y esfuerzo de frenado.
✅ Haz descansos si viajas en zonas de montaña o puertos con frenado constante.
✅ No laves el coche después de usar intensamente los frenos, espera a que se enfríen.
¿Cuándo acudir a un taller?
-
Si hace más de un año que no revisas el sistema.
-
Si vas a hacer un viaje largo o exigente.
-
Si notas cualquiera de los síntomas anteriores.
-
Si el líquido de frenos tiene más de 2 años o presenta mal aspecto.
En Talleres Santa Mónica, realizamos revisiones completas del sistema de frenos: pastillas, discos, líquido, sensores ABS y más. La seguridad es lo primero, y un sistema de frenos en buen estado es tu mejor garantía.
Errores comunes en verano que dañan los frenos
❌ No cambiar el líquido de frenos cuando corresponde.
❌ Conducir cuesta abajo solo con el freno.
❌ Ignorar ruidos al frenar.
❌ Usar pastillas baratas o de baja calidad.
❌ No revisar los frenos antes de vacaciones o viajes largos.
El calor del verano no solo afecta al motor, también puede comprometer uno de los sistemas más importantes de tu coche: los frenos. Revisar los frenos a tiempo es vital para prevenir fallos, reducir el desgaste y garantizar una conducción segura.
Hazlo antes de tu próximo viaje. Hazlo por tu seguridad. Hazlo con profesionales.